Entro al elevador, en los hospitales, saludo, y nadie contesta.
¡Que poca… amabilidad! usando el trasporte público, saludo y me ignoran.
Eso es lo que hace falta para hacer menos complicada una ciudad como la nuestra con tráfico, ruido, insultos…
Por eso me llevé una sorpresa cuando me enteré que existe el Día Mundial de la Amabilidad y que será el próximo sábado.
Hagamos un esfuerzo y, aunque sea por un día, vamos a sonreír a la persona que nos dio el paso, a quien nos abrió la puerta porque llevábamos las manos ocupadas , y a quien detuvo su vehículo para que atravesáramos la calle.
Este sábado, anímate a ser amable....
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